La madera tiene muchos usos y beneficios, desde la construcción hasta la fabricación de papel, muebles y otros objetos. Sin embargo, la madera también puede ser una fuente de problemas ambientales y sociales si no se gestiona de forma sostenible. Por eso, la Unión Europea ha establecido un Reglamento para la comercialización de madera que busca garantizar que la madera que se vende en el mercado europeo proviene de fuentes legales y respetuosas con el medio ambiente y los derechos humanos.

El Reglamento para la comercialización de madera en la Comunidad Europea se llama oficialmente Reglamento (UE) Nº 995/2010 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 20 de octubre de 2010, por el que se establecen las obligaciones de los agentes que comercializan madera y productos de la madera. Este Reglamento entró en vigor el 3 de marzo de 2013 y se aplica a todos los Estados miembros de la Unión Europea.

El objetivo principal del Reglamento es prevenir la entrada en el mercado europeo de madera y productos de la madera procedentes de talas ilegales o que no cumplan con las normas ambientales y sociales del país de origen. La tala ilegal es una actividad que contribuye a la deforestación, la pérdida de biodiversidad, el cambio climático, la corrupción, el conflicto armado y la violación de los derechos humanos. Además, la tala ilegal supone una competencia desleal para los productores y comerciantes que cumplen con la ley y respetan el medio ambiente.

El Reglamento establece tres tipos de obligaciones para los agentes que comercializan madera y productos de la madera en el mercado europeo:

La obligación de diligencia debida

Los agentes que introducen por primera vez madera o productos de la madera en el mercado europeo deben aplicar un sistema de diligencia debida que les permita conocer el origen, la legalidad y la trazabilidad de la madera o productos de la madera que comercializan. El sistema de diligencia debida debe incluir tres elementos: información sobre el producto, su proveedor y su país de origen; evaluación del riesgo de que la madera o productos de la madera provengan de fuentes ilegales o no sostenibles; y medidas para mitigar ese riesgo si existe.

La obligación de trazabilidad

Los agentes que compran o venden madera o productos de la madera ya introducidos en el mercado europeo deben llevar un registro de sus proveedores y clientes para facilitar la trazabilidad del producto a lo largo de la cadena de suministro.

La obligación de cooperación

Los agentes que comercializan madera o productos de la madera deben cooperar con las autoridades competentes de los Estados miembros que se encargan de verificar el cumplimiento del Reglamento y sancionar las infracciones. Las autoridades competentes pueden realizar inspecciones, solicitar información, tomar muestras o retirar productos del mercado si detectan irregularidades.

El incumplimiento del EUTR (reglamento de la madera de la Unión Europea) puede conllevar sanciones administrativas o penales, según la legislación nacional de cada Estado miembro. Estas sanciones pueden incluir multas, confiscación de la madera o los productos de madera, suspensión o revocación del permiso para operar o comerciar con madera o productos de madera, o incluso penas de prisión en algunos casos.

El EUTR es una herramienta clave para luchar contra la tala ilegal y sus efectos negativos sobre el medio ambiente, la biodiversidad, el clima, los derechos humanos y el desarrollo sostenible. Al cumplir con el EUTR, los operadores y los comerciantes contribuyen a promover una gestión forestal responsable y a apoyar a los productores legales de madera.

El Reglamento para la comercialización de madera en la Comunidad Europea abarca una amplia gama de productos derivados de la madera, tanto sólida como procesada. Algunos ejemplos son: tableros, chapas, contrachapados, aglomerados, laminados, parquet, muebles, papel, cartón, embalajes, instrumentos musicales, juguetes, herramientas, etc. Sin embargo, el Reglamento excluye algunos productos como los impresos (libros, revistas, periódicos), los reciclados (papel reciclado) o los transformados químicamente (viscosa).

Como consumidor, productor o comerciante de madera o productos de la madera en el mercado europeo, debes saber que el Reglamento para la comercialización de madera en la Comunidad Europea te afecta de diferentes formas:

• Como consumidor, puedes estar seguro de que la madera o productos de la madera que compras en el mercado europeo provienen de fuentes legales y sostenibles, y que contribuyes a la protección del medio ambiente y los derechos humanos en los países productores de madera. Además, puedes exigir a los vendedores que te informen sobre el origen, la legalidad y la trazabilidad de la madera o productos de la madera que adquieres.
• Como productor, debes cumplir con las leyes y normas ambientales y sociales del país donde talas o cosechas la madera, y facilitar la información necesaria a los compradores para que puedan aplicar el sistema de diligencia debida. Si exportas madera o productos de la madera al mercado europeo, debes asegurarte de que tu producto cumple con los requisitos del Reglamento y que puedes demostrar su origen, legalidad y trazabilidad.
• Como comerciante, debes aplicar el sistema de diligencia debida si eres el primer agente que introduce madera o productos de la madera en el mercado europeo, o llevar un registro de tus proveedores y clientes si compras o vendes madera o productos de la madera ya introducidos en el mercado europeo. Además, debes cooperar con las autoridades competentes si te solicitan información o te realizan una inspección.

El Reglamento para la comercialización de madera en la Comunidad Europea es una herramienta importante para luchar contra la tala ilegal y promover el comercio sostenible de madera y productos de la madera. Si quieres saber más sobre este Reglamento, puedes consultar el sitio web oficial de la Comisión Europea:

https://ec.europa.eu/environment/forests/timber_regulation.htm